La pérdida de pelo es un problema que afecta al 20 % de los varones a partir de los 20 años. A edades tan tempranas, la caída del cabello supone un importante contratiempo estético. También genera problemas de autoestima. Combatir la alopecia juvenil es posible con tratamientos. Incluso, aunque no es la edad de preferencia, también se puede recurrir a un injerto de pelo.
La alopecia androgenética en ocasiones aparece a edades tempranas. Se trata de un tipo de caída de cabello que tiene un antecedente familiar (el padre, la madre o el abuelo materno). Por eso se la llama alopecia hereditaria.
Es muy habitual que este tipo de caída del cabello comience a aparecer en la veintena y a veces incluso antes. Lo habitual es que la pérdida de pelo comience a darse en las entradas. Y que en la coronilla comience a clarearse el cuero cabelludo.
Qué se debe hacer para combatir la alopecia juvenil
Combatir la alopecia juvenil que tiene un componente genético es imposible. Aunque tener un padre o un abuelo calvo no significa que un joven esté abocado a la calvicie con seguridad, sí le otorga una cierta predisposición. Y hay otros factores que entran en juego y también pueden contribuir a perder pelo. Es en esos factores en los que sí podemos prevenir.
- Alimentación: Para cuidar la salud del cabello, hay que seguir una dieta equilibrada, que sea rica en nutrientes. Evita el alcohol y las grasas, que afectan a la fortaleza del cabello.
- Estrés: Situaciones de ansiedad y estrés pasan factura a la salud en general. Y también a la salud del pelo. Incluso en ocasiones son una de las causas que más influye en la caída.
- Contaminación: La polución ambiental habitual en grandes ciudades afecta a la salud de la piel, pero también afecta al cabello. En ambos casos produce lo que se llama un estrés oxidativo, que conlleva un envejecimiento celular prematuro. Si en el rostro aparecen arrugas, el cabello se debilita y puede empeorar situaciones previas de caída.
- Productos cosméticos y hábitos estéticos: El uso continuado de planchas y secadores puede afectar a la salud del cabello. Respecto a los tintes, hay que tener cuidado con los que llevan decoloración. No provocan una caída capilar pero pueden alterar las propiedades físico-químicas del cabello. Es pelo se volverá más débil y frágil.
Quizá por algunos de estos factores que acabamos de explicar, la pérdida de pelo en jóvenes ha crecido de modo importante en los últimos años. Cuando no se pueden controlar estos factores, se puede recurrir a otras soluciones para combatir la alopecia juvenil consultando a un especialista.
¿Tratamientos o trasplante?
Muchos de los pacientes con alopecia juvenil acuden a nuestra clínica para informarse sobre la posibilidad de un trasplante de pelo. Aunque es perfectamente posible desde los 18 años, en ocasiones sin embargo no es la opción de preferencia.
El problema de la alopecia juvenil es su inestabilidad. Para ser buen candidato a un trasplante de pelo se necesita que la caída de cabello se haya estabilizado. Y esto no suele suceder hasta los 30 años, aproximadamente.
Acometer un trasplante de pelo en situaciones de alopecia inestable puede comprometer el éxito futuro de la cirugía. El trasplante conseguirá que el paciente tenga pelo en zonas que hoy son alopécicas. Pero eso no le eximirá de que el cabello del resto de zonas se le siga cayendo. Con lo cual, en el futuro tendrá otras áreas con alopecia. Y eso provocaría que necesitara una nueva cirugía.
Por eso, es mucho más frecuente que a los pacientes jóvenes se les recomiende comenzar por tratamientos médicos antes que un trasplante.
Cómo son los tratamientos
Estos tratamientos van encaminados a favorecer la estimulación del crecimiento del cabello. Son la opción preferente cuando la alopecia no está aún en un estado avanzado. Una de las mejores opciones es el Plasma Rico en Plaquetas. Se trata de utilizar sangre del propio paciente, por lo que es un procedimiento muy seguro y no hay riesgo de rechazo. Se extrae una pequeña muestra que se centrifuga en el laboratorio, para separar el plasma rico en factores de crecimiento. Ese plasma se infiltra de nuevo en el cuero cabelludo mediante microinyecciones. Su acción es efectiva para frenar la caída porque estimula la revascularización de la zona. Hay una mejor irrigación sanguínea, que consigue hacer llegar los nutrientes a los folículos. Así se fortalecen y además se favorece la producción de colágeno, elastina y ácido hialurónico.
En pacientes jóvenes también se puede optar por tratamientos médicos como Minoxidil o Finasteride, ambos de eficacia probada.
Si eres joven y te preocupa una posible alopecia temprana, realiza este test del pelo. En él puedes explicarnos cómo es tu pelo y mostrárnoslo a través de las fotos que nos envíes. Nuestro equipo de especialistas realizará un diagnóstico gratuito y eficaz.
También puedes contactar con nosotros sin compromiso y valoraremos tu caso personalmente.
