La pérdida de pelo progresiva es una fase lógica del envejecimiento del ser humano. Algunos empiezan antes, otros algo más tarde pero la pérdida lenta y progresiva de pelo es muy común en hombres entre los 20 y los 30 años. Una edad en la que se le da especial importancia al aspecto físico por lo que no todo el mundo se acepta cuando se ve en el espejo.
En el caso clínico de hoy presentamos un varón que describe una pérdida de pelo lenta desde hace unos 8-9 años. Su caída de pelo se concentra sobre todo en la zona interior hasta llegar al patrón actual de alopecia androgenética tipo IV-A.
Qué es la alopecia androgenética de tipo IV-A
Se trata de una fase de calvicie más avanzada. Generalmente se reconoce por una zona frontal con menos pelo que en el grado III. La densidad del pelo se reduce notablemente en la zona de coronilla también, no en todos los casos pero si en la mayoría.
En el caso de este varón no tenía en la familia ningún caso de calvicie como suele ocurrir con otros casos. Durante su pérdida de pelo progresiva tomaba Finasteride 1mgr desde hacía muchos años y desde hace unos meses Minoxidil 5%. Acudió a la clínica para valorar un posible trasplante de pelo.
Le proponemos una sesión máxima para aumentar densidad anterior y superior con unidades foliculares de 2-3 pelos para obtener la máxima densidad posible. No actuar a nivel de la 1ª línea ya que mantiene integridad de la misma.
Se trasplantan 1.737 unidades foliculares de 2 y 3 pelos con técnica de la tira lo que equivale a más de 4.000 cabellos trasplantados.
Le recomendamos seguir con Finasteride 1 mgr (1 por día) y Minoxidil 5% (10-12 pulverizaciones por día) como tratamientos de mantenimiento tras el trasplante.
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